lunes, 1 de junio de 2009

DIAGNOSIS DE LA FAMILIA FELIDAE

La Familia Felidae (los félidos) comprende unas 38 especies y su posición taxonómica dentro de la naturaleza es:

Reino Animalia (Animales) --> Phylum Chordata (Cordados) --> Clase Mammalia (Mamíferos) --> Orden Carnivora (Carnívoros) --> Familia Felidae (Félidos).

Las características principales que definen a los miembros de este grupo de mamíferos carnívoros y los diferencian de los demás grupos son las siguientes:


  • Origen e historia evolutiva: los primeros felinos surgen hace aproximadamente unos 40 millones de años –m.a.-, en el Eoceno (periodo comprendido entre hace unos 56 y 34 m.a.) superior (dentro de la Era Cenozoica, que se extiende desde hace unos 65’5 m.a. hasta la actualidad). Sin embargo, las especies de felinos actuales descienden de un antepasado común del Oligoceno (periodo comprendido entre hace unos 34 hasta los 23 m.a., también en el Cenozoico), el Pseudaelurus, del que también descienden los conocidos “Tigres dientes de sable” (Gen. Smilodon), extintos durante el Pleistoceno (2’6 m.a. – 11700 años aprox.) y caracterizados por tener un caninos extraordinariamente desarrollado, de ahí su nombre.
  • Alimentación: los felinos son animales depredadores, que se alimentan básicamente de las presas que ellos cazan, es decir, de carne. Esas presas pueden ser de distinto tamaño, desde un roedor en el caso del gato doméstico, hasta una cebra o un antílope en el caso del león. Las adaptaciones morfológicas del grupo están justificadas por este comportamiento depredador.
    Suelen ser animales solitarios, excepto los leones, que cazan en grupo, y prefieren hacerlo en el alba o en el ocaso. La técnica de caza consiste en ir acechando a la presa y cogerla tras una corta y rápida carrera.

  • Reproducción: las crías suelen alcanzar la edad adulta a los 5 años de vida, siendo los machos de mayor tamaño que las hembras.

  • Características morfológicas identificativas:

- Cabeza redondeada y cráneo corto (1), con arcos zigomáticos anchos (2).

- Rostro u hocico corto, con una mandíbula robusta para aumentar la potencia de la mordedura (3).
- Dientes adaptados a una alimentación carnívora (muy eficaces para cortar y desgarrar): son altos y agudos, y reducidos en número, sobre todo los molares, no existiendo ninguna pieza trituradora. La fórmula dentaria es la siguiente:

Hemimandíbula superior: 2x 3:1:2:1 (Incisivos:Caninos:Premolares:Molares)
Hemimandíbula inferor: 2x 3:1:2:1 (Incisivos:Caninos:Premolares:Molares)


- Los incisivos están poco desarrollados (4), los caninos muy grandes, puntiagudos y un tanto arqueados (especializados en cortar carne) (5); los premolares están poco desarrollados y son puntiagudos (6), y por último el único molar de cada hemimandíbula (muela carnicera) tiene modificaciones que le hacen actuar a modo de cizalla que corta la carne (7).



- La mayoría tienen garras agudas, curvadas y retráctiles, excepto el guepardo, lo que facilita que se mantengan intactas cuando no se encuentran cazando.

- Sentidos muy desarrollados, especialmente la vista y el oído, lo que les permite ser buenos cazadores: orejas y ojos muy grandes (con los que pueden ver tanto de día como de noche gracias a diferentes mecanismos como una capa situada frente a las células sensitivas de la retina, denominada tapetum lucidum, que actúa como un espejo y permite aprovechar al máximo la escasa luz nocturna, o a la gran capacidad de las pupilas para dilatarse o contraerse en función de la intensidad lumínica).

- Son digitígrados, es decir, al caminar tan sólo apoyan los dedos sobre el suelo: este hecho se relaciona con una adaptación a la carrera, necesaria para los animales depredadores (ver imagen de esqueleto).


- Pelaje muy variado: en primer lugar en cuanto al patrón de estampado, que puede ser liso (en el león), a rayas (en el tigre), jaspeado (en la pantera nebulosa), con manchas etc. En segundo lugar, en cuanto a la pigmentación, que suele consistir en colores tostados, que van desde al albino de determinados leones y tigres hasta el negro azabache de leopardos y jaguares. Esta variabilidad en el pelaje es un mecanismo de camuflaje.


  • Hábitat: pueden ocupar una gran variedad de hábitats, desde lugares con mucha vegetación como selvas (algunos son arborícolas) hasta sabanas, praderas e incluso desiertos; soportan desde temperaturas muy altas hasta muy bajas, y pueden vivir desde las llanuras a nivel del mar hasta los grandes picos del Himalaya y los Andes.

  • Distribución: las especies de felinos se encuentran distribuidas por prácticamente todo el mundo, excepto Oceanía, la Antártida y algunas islas, como Madagascar: se trata por tanto de un grupo cosmopolita, debido a la gran cantidad de hábitats en que puede vivir.

_ Bibliografía-referencias:

1. Kowalski, Kazimierz. 1981. Mamíferos : manual de teriología. Página 256. Editorial Blume.

2. MacDonald D, (DIR. De invest. De Oxford). 2006. La gran enciclopedia de los mamíferos. Páginas 34-37. Editorial La Libsa.

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